Emprendedores
5 formas en las que una startup puede vencer a las grandes empresas
Uno de las cosas más intimidantes a las que se enfrenta un emprendedor es tener como competencia un gran corporativo. Aún así, como la historia de David y Goliat, es posible vencer al gigante o por lo menos no quedar aplastado a su paso. Si estás pensando emprender un negocio o ya tienes una startup y uno de tus competidores es una gran empresa, estos 5 consejos te ayudarán a hacerte un lugar en la carrera:
1. Se rápido:
Es cierto que las grandes empresas tienen muchos recursos, pero también cuentan con largos procesos burocráticos. Esto las hace lentas, y si hay algo que los clientes odian es el servicio lento. Se veloz al responder tus correos electrónicos, envía tu producto lo antes posible, atiende las preguntas o solicitudes de servicio tan rápido como sea posible. Usa esa debilidad de las grandes empresas para tu ventaja y gana esas ventas.
2. No te detengas:
Acostúmbrate a escuchar la palabra «no» al inicio, pero no te desilusiones. Sigue buscando excusas para enviar correos electrónicos o reunirte con clientes potenciales. Tus clientes son inteligentes y aunque digan que no, recordarán a una empresa que no se da por vencida. Por otro lado, muchas grandes empresas sienten que no pierden nada al perder a uno o dos clientes, por lo que los toman por sentado. Así que cuando tengas una oportunidad, tómala.
3. No te dejes intimidar:
Todos saben que eres una empresa pequeña, pero no tienes que actuar como tal. Solo porque tu competencia gasta millones de dólares en marketing, no quiere decir que sean mejor que tú. Contrata personas con iniciativa que sepan desarrollar un gran producto y sientan pasión por tu negocio, esto demostrará que eres un verdadero líder. Muestra un alto nivel de confianza, se inteligente y solicita que tu equipo trabaje bajo estas expectativas. Si tú crees que tu competencia no tiene oportunidad frente a ti, un día verdaderamente será así.
4. Escucha:
Las grandes empresas suelen dejar de escuchar a sus clientes, o simplemente deja de importarles lo que ellos quieren. Muchas veces tienen productos que no modificarán aún cuando los clientes lo estén pidiendo. Como negocio pequeño, haz lo contrario. Crea una cultura empresarial que se centre en tus clientes. Personaliza todo lo que puedas y sobre todo, escucha a tus clientes. Ellos te dirán exactamente lo que quieren, tu trabajo es cumplir con sus requerimientos. Los clientes aman a las empresas que resuelven sus problemas y la forma de hacerlo es escuchándolos.
5. Entiende que las cosas toman tiempo
Las pequeñas empresas no se convierten en grandes imperios de la noche a la mañana, es importante que tengas una visión clara de a dónde quieres llegar y que no dejes que nada te desilusione. Al inicio es probable que tengas pocas ventas, pero llegará el momento en el que esto cambie y deberás estar preparado. Una vez que llegue ese momento, trabaja todavía más duro. Llegará el punto en el que dejarás de ser una empresa pequeña y tal vez te conviertas en ese gran corporativo al que ahora las startups querrán vencer.
Responder